Análisis de Shellshock 2: Blood Trails
El pasado 13 de Febrero hizo su debut el título Shellshock 2: Blood Trails en todo el territorio europeo. Por su parte, su llegada a los EEUU se retrasó un poco más, y recién estuvo en las tiendas el 24 del mismo mes.
Se trata de un videojuego perteneciente al clásico shooter en primera persona, que ha sido desarrollado por la compañía Rebellion Developments y publicado por Eidos Interactive. Cuenta con versiones para las consolas PlayStation 3, Xbox 360 y Microsoft Windows (PC).
En el juego, tú te pondrás en el rol de Nate Walker, un soldado que participa en la guerra de Vietnam. Básicamente el problema principal gira en torno a la desaparición de un miembros de las fuerzas especiales.
Sucede que éste fue enviado a lugares recónditos en Camboya, con la misión expresa de recuperar el WhiteKnight, una carga importante que había sido perdida cuando se estrelló uno de los aviones que la transportaban. Sin embargo, nunca logró cumplir este objetivo y será tu deber ir en su búsqueda.
La crítica especializada se ha dividido en torno a la apreciación general del juego; sucede que ha sido desarrollado por Rebellion, quienes fueron los encargados de títulos como Star Wars Battlefront: Renegade Squadron y The Simpsons Game. Esto significa que ya desde el inicio cargaba con bastantes expectativas que, en parte, fueron cumplidas.
Básicamente, entre lo positivo que se rescata está la buena calidad de los sonidos ambientales, y una banda sonora realmente aceptable. La historia también resulta atrapante, pero sinceramente se esperaban mejores gráficos, y sobre todo en el diseño de los escenarios, un nicho que aún falta mucho por explotar. Especialmente, porque sabemos que los de Rebellion pueden dar mucho más.
Enlace: Rebellion Developments
Vía: IGN