Análisis de clásicos: Fire Emblem (Game Boy Advance)

Fire Emblem llego a la Game Boy Advance para traer lo mejor de la estrategia por turnos de ambientación medieval.

Un apartado gráfico sencillo, pero muy colorido, y una jugabilidad inspirada en el “piedra, papel o tijera” pero con distintas unidades de ataque.

Magos, caballeros, jinetes y arqueros se baten a duelo mientras se desarrolla una trama repleta de conspiraciones y dilemas políticos con personajes de tipo anime.

La dificultad de este título, comparado con otros del género de la estrategia táctica, implica que si uno de los personajes importantes muere ya no podrás utilizarlo en las próximas misiones, modificando también la trama.

A nivel gráfico el juego se parece bastante a Advance Wars, aunque con un mundo más inspirado en los castillos medievales y en la fantasía heroica, así que veremos dragones, magos y todo tipo de criaturas dignas de Tolkien.

Las secuencias de batalla pueden tornarse aburridas, por eso se agradece la opción de deshabilitarlas. Fire Emblem es un título complejo, con varios elementos de RPG que nos permitirán controlar el crecimiento y la evolución de nuestros personajes.

Programado por Intelligent Systems, Fire Emblem es parte de una saga que ha tenido varias iteraciones desde su aparición en la NES de 8 bits.

Vía: Guiasnintendo